Bogotá, 29 de julio de 2022. Las orquídeas, sin duda, son plantas que despiertan un gran interés, desde lo comercial, biológico y contemplativo, lo que hace que cada día se realicen más esfuerzos para el desarrollo de estudios que permitan aumentar su diversidad. Colombia, es un país con un alto número de especies endémicas, es decir propias, y en el Valle del Cauca estas plantas tienen un lugar muy relevante dado su variedad de ecosistemas presentes en la región.
Gracias al trabajo de investigación colaborativo entre el Parque Nacional Natural Farallones de Cali, su zona de amortiguación y La Universidad del Valle, se descubrieron cuatro especies nuevas de orquídeas miniatura (2mm – 6mm), pertenecientes al género Lepanthes, un grupo que cuenta con más de 300 especies en Colombia. Muchas de estas orquídeas miniatura son endémicas del país y están restringidas a áreas muy pequeñas de los bosques andinos, lo que, sumado a la deforestación de estas regiones, las ha puesto en peligro de extinción.
La región boscosa de San José del Salado, en el municipio de Dagua, es un área importante para la conservación en el Valle del Cauca, pues contiene el Distrito de Manejo integrado el Chilcal, varias reservas de la sociedad civil y limita con el PNN Farallones de Cali. En los últimos años y gracias al trabajo de diversos actores, varias especies nuevas de orquídeas se han encontrado en esta región, lo que resalta su importancia para la conservación.
Por su parte, el herbario de la Universidad del Valle, como parte de su compromiso con la región, ha realizado esfuerzos por describir su biodiversidad. Este trabajo incluye profesores, estudiantes, comunidad y entidades como Parques Nacionales Naturales de Colombia.
Las cuatro especies nuevas fueron publicadas en la revista Lankesteriana y solo son conocidas en el Valle del Cauca. Una de ellas fue bautizada Lepanthes cardenasii, en honor al recientemente fallecido botánico Dairon Cárdenas, uno de los botánicos más prolíficos de Colombia, quién colecto cerca de 50.000 ejemplares de plantas. Fue director del herbario Amazónico del Instituto Sinchi por cerca de cuatro décadas, haciendo aportes muy importantes al conocimiento de la flora amazónica.
La segunda, Lepanthes davidii, fue nombrada en honor a David Galindo, hijo de uno de los autores, Robinson Galindo-Tarazona, quien, desde la territorial Pacífico de Parques Nacionales, ha apoyado las investigaciones de la flora de la región.
Otra especie, Lepanthes dorae, está dedicada a Dora Alicia Londoño Hoyos «Doña Dora», una mujer campesina que ha desarrollado un emprendimiento de observación de aves en el kilómetro 55 de la antigua vía al mar, en el municipio de Dagua, uno de los lugares donde también se encontró la nueva especie. Este es un ejemplo de trabajo ancomunado entre las comunidades y las áreas protegidas para hacer uso sostenible de la biodiversidad.
Finalmente, también se descubrió la orquídea Lepanthes morae, dedicada a Danny Leandro Mora, un joven nacido en San José del Salado, quien lleva varios años explorando su región y velando por su conservación. Danny es un naturalista y fotógrafo que no solo documenta plantas, también aves, ranas e insectos y ha participado en la descripción de nuevas especies de orquídeas.